El otoño de 2025 comienza oficialmente el 22 de septiembre con el equinoccio, un momento en el que el día y la noche duran prácticamente lo mismo. Desde entonces, las jornadas irán acortándose y las noches se alargarán, hasta la llegada del invierno el 21 de diciembre.
Uno de los cambios más significativos que trae esta estación es el ajuste horario:
En la madrugada del domingo 26 de octubre, los relojes deberán atrasarse una hora, pasando de las 03:00 a las 02:00 en la península.
De esta manera recuperaremos el llamado horario de invierno, con amaneceres más tempranos y atardeceres que llegarán antes.
Pero el otoño no solo se siente en la rutina diaria. El firmamento ofrece algunos de los espectáculos más esperados del año:
Lluvias de meteoros como las Dracónidas (8 de octubre), las Oriónidas (21 de octubre), las Leónidas (17 de noviembre) y las Gemínidas (13-14 de diciembre), estas últimas consideradas una de las más espectaculares.
Tres lunas llenas iluminarán las noches del 7 de octubre, 5 de noviembre y 5 de diciembre.
Constelaciones destacadas como Pegaso, Andrómeda y Perseo dominarán el cielo otoñal, a las que se sumarán Tauro y Orión conforme avance la estación.
En definitiva, el otoño 2025 llega con un doble cambio: el ajuste del reloj al horario de invierno y la oportunidad de disfrutar de noches cada vez más largas bajo un cielo lleno de fenómenos astronómicos. Una estación para abrigarse, mirar arriba y dejarse sorprender por el universo.