El cauce del río Turia vuelve a estar en el punto de mira de las autoridades valencianas. A pocos días del inicio de la temporada de lluvias y de posibles episodios de gota fría, el Ayuntamiento de Valencia ha puesto en marcha un plan intensivo de limpieza y mantenimiento en distintas zonas del antiguo cauce del río.
Este plan contempla la retirada de residuos, sedimentos, vegetación descontrolada y cualquier tipo de obstáculo que pudiera dificultar el normal desagüe en caso de precipitaciones intensas. El objetivo es claro: prevenir inundaciones y mejorar la capacidad de respuesta ante fenómenos meteorológicos extremos.
La decisión llega en un momento especialmente sensible, después de que las fuertes lluvias del pasado octubre provocaran importantes pérdidas humanas y daños personales y materiales en varios municipios del área metropolitana. En aquel entonces, muchos vecinos y expertos criticaron la falta de limpieza de varios cauces, lo que, según apuntaron, contribuyó al colapso.
Con esta intervención, Valencia se adelanta a los posibles riesgos, apostando por una ciudad más preparada.